Faltan 10 minutos para las tres de la madrugada del 19 de junio de 2006.
Situación actual, tengo una bolsa de agua caliente en la cama, una taza de té humeante en la mesa del comedor, un porro sobre la mesa de luz, un disco de ska francés girando en el equipo y un lunes feriado para cuando me despierte.
Es suficiente.
Yo, Conciente de mi conciencia.
Siento mucha rabia y una enorme presión.
Esta vida es como una cárcel sin rejas, el peso de la libertad me agobia.
Quiero ordenarme, pero no se por donde empezar.
El caos es total.
Necesito descargar esta frustración.
Yo, totalmente impotente
Si soy nada podré ser todo.
El límite entre el bien y el mal es móvil.
Que se yo de la vida.
Me va a resultar mas fácil decir que soy nuevo, en vez de enfrentar naturalmente mi destino.
Estoy planeando planear un gran plan para todo y todos.
El recuerdo es vago, pero se me revela así, cuando teníamos que salir de casa sin comer, mamá nos decía que tomemos aunque sea agua para no tener el estómago bacío.
Ahora que no tengo alimentos para consumir, antes de salir de casa me tomé dos tazas de té amargo.
En realidad no sabe tan mal.
Ahora tengo que salir a la calle.
Tengo que entrar en contacto con el mundo exterior, creerán que he muerto?
Bueno!, si lo creen no están tan lejos de la realidad.
Como decía Dolina ayer, yo debo ser un fantasma que todavía se resiste a creer que está muerto.
Son las doce en punto del día.
Me queda la mitad para desperdiciar.
Que mas da?
Tomador de té amargo
El otro yo decía: estar perdido no es tan malo, creo que hacían referencia a la idea de que a partir de la crisis surge algo nuevo.
En unos minutos salgo a encontrarme con ale, ya no sé para donde va la relación, a la conclución que llegué es que todo lo que suceda es mi responsabilidad, ya no puedo descargar mi frustración en ella.
no la puedo culpar de no ser la mujer de mis sueños.
mas tarde voy a hablar de la crisis generalizada.
ya es hora de irme.
perdedor por elección